La Reforma protestante escocesa significa el proceso de desarrollo de una Iglesia Nacional predominantemente calvinista (Juan Calvino de Génova). Y la jurisdicción Papal finaliza en Escocia como parte de un movimiento de Reforma protestante europeo en el siglo XVI.
El impacto inmediato era la forma en cómo la Cristiandad se practicaba y la excesiva opulencia y corrupción de la Iglesia.
La Reforma tuvo gran impacto en la educación (por ejemplo, el libro de de disciplina de John Knox en materia de impartir educación). A causa de ello, ayudó en el incremento del número de escuelas, así es que la tasa de alfabetización aumentó.
Andrew Melville y sucesores incrementaron el currículum nacional de educación para cubrir, lenguas, ciencia, filosofía y divinidad, aumentando el número de estudiantes.
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El amplio uso del latín en escritura empezó a declinar con el fin de distanciarse la nueva fe de Roma. Esto facilitó a la población ordinaria el acceso a la religión.
John Knox, el reformador en Escocia, escribía en inglés, y no era tomado en buena consideración por la jerarquía eclesiástica, sin embargo, fue bien recibido entre poetas y autores de época.
Así es que el arte eclesiástico declinó debido a la iconoclasia predominante de la Reforma, lo que causó que artistas desviasen su interés a edificios seculares, creando un estilo particular en la arquitectura y estilos de Escocia.
La arquitectura en la Iglesia se modificaría emplazando el púlpito al centro de las iglesias desde donde llegaría a ser el lugar de lecturas y predicación.
El protestantismo había centrado su atención de las actividades religiosas en las pequeñas parroquias locales.
La mujer alcanzó nuevas posibilidades educacionales que a largo plazo se traducirían en igualdad.
uando los monasterios o catedrales se disolvieron, sus propiedades se confiscaron y muchos de los que fueron inquilinos en tierras de la Iglesia podían llegar a ser dueños independientes de las mismas, a largo plazo el capitalismo floreció.
La aceptación de la fe protestante causó efecto positivo en el comercio con los países del Norte de Europa. Esto propició interacción económica entre estos países pasando a ser parte de un gran familia europea en el mercado.
La Iglesia escocesa llegó a ser sujeto del orgullo nacional, nada más y nada menos.